Resumen artículo
En los últimos años ha venido escuchando insistentemente que los profesionales de trabajo social no son suficientemente eficaces en las labores que la sociedad, la empresa o los individuos les solicitan. La menor valoración que se asigna a su trabajo en comparación con otros profesionales y la dramática reducción de postulantes para estudiar esta carrera principalmente en universidades latinoamericanas privadas, serían algunas expresiones de esta situación, que se presenta en circunstancias dadas de carácter político y económico de la realidad. Frente a ello existe un grupo radical que sostiene que la profesión habría concluido su ciclo de vida con el siglo que acaba de terminar, y en consecuencia, desaparecería con él. ¿Debemos resignarnos a este destino y olvidarnos del trabajo social? Creemos que no. No sólo por la persistente existencia de los problemas sociales que le dieron origen como profesión y cuyo aumento y complejidad justifican ahora más que nunca su existencia; si no también, porque el trabajo social en esencia, sigue siendo válido para atender la problemática psicosocial de diferentes sectores residuales de la sociedad. Trataré, en lo que sigue, de fundamentar esta posición.
Palabras Clave
intervención social; metodología; trabajo social; desvalorización
Referencia normalizada (para citas)
Chirinos de García, I. (2002). Problemática y nuevo enfoque conceptual y operativo del método de intervención social. Servicios Sociales y Política Social, 57, 95-99